No es ningún secreto que conducir de noche es más peligroso que conducir de día. Cuando luchas contra personas con mala visión, somnolencia y distracción del conductor, evitar todos los riesgos a tu alrededor puede ser un desafío. Si bien es posible que prefieras mantenerte alejado de la carretera por completo, generalmente no es posible evitar conducir en la oscuridad. Ya sea que seas un novato o un veterano con experiencia, podes utilizar los siguientes consejos prácticos para conducir de manera segura después de que el sol se pone:
1. Defensa adicional. La primera regla que nos enseñan en las escuelas de manejo es estar siempre a la defensiva: debes estar alerta, obedecer todas las reglas y señales de tránsito y estar preparado para lidiar con otros conductores que podrían hacer cosas inesperadas. Por la noche, tenes que mejorar tus reflejos porque las posibilidades de conducir cerca de un conductor somnoliento son más altas de lo habitual. Cuando conduzcas en la oscuridad, prestá mucha atención a otros vehículos, especialmente a aquellos que puedan comportarse de manera anormal, y estate preparado para alejar tu vehículo en cualquier momento para evitar lesiones. Al conducir en áreas rurales, prestá atención a la vida silvestre que pueden emerger después del anochecer.
2. Mantené limpio el parabrisas. Al conducir de noche, notarás fácilmente toda la suciedad que se ha acumulado en el parabrisas en un día, una semana o un mes. Las cosas en el parabrisas pueden afectar tu visibilidad, especialmente cuando la luz del día no está a tu alrededor. Antes de salir por la noche, asegurate de tomarte un tiempo para limpiar el exterior del parabrisas con un limpiaparabrisas y de que tu vehículo tenga suficiente líquido limpiaparabrisas para tu viaje. Si tus limpiaparabrisas no limpian bien, puede que sea el momento de reemplazarlos.
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3. Mantené baja la iluminación interior. Entre las luces del tablero, la cámara del tablero y el dispositivo GPS, tu automóvil se iluminará rápidamente y distraerá. Al conducir de noche, el brillo de estos dispositivos debe reducirse al mínimo nivel práctico. Al atenuar estos dispositivos, podes minimizar los reflejos en las ventanas y tus ojos también pueden adaptarse a la carretera oscura que tenés por delante.
4. Tenes que saber cuándo usar las luces altas. Encender las luces altas es una buena forma de mejorar la visibilidad cuando se conduce de noche, ya que pueden aumentar la vista de la carretera desde 45 metros por delante hasta unos 90 metros. Pero también es importante recordar no usarlos todo el tiempo. Debes encender las luces altas solo cuando estés en un campo o en una carretera abierta; si ves que otro automóvil se acerca o conduce detrás de otros, siempre debes atenuar las luces altas. Si mantenes las luces altas todo el tiempo, podes cegar temporalmente a otros conductores debido a las luces de corto y medio alcance.
Al conducir en el campo o en carreteras abiertas de noche, podes utilizar las luces altas del vehículo para mejorar tu vista. Pero recordá, siempre atenuá las luces cuando se acerquen en sentido contrario o conduzcas detrás de otros.
5. Evitá mirar directamente a los faros de otros vehículos. Y recordá atenuar las luces altas. Para proteger tus ojos de los faros potencialmente deslumbrantes de otros conductores, mirá hacia abajo y hacia la derecha cuando pases a los vehículos que se aproximan. Podes usar el borde de la carretera u otras marcas de carril para asegurarte de permanecer seguro en el carril antes de rebasar por completo al vehículo opuesto.
6. Conducí despacio. Al conducir por carreteras con poca iluminación de noche, solo podes ver la distancia máxima que pueden alcanzar los faros. Si conducís demasiado rápido, no tendrás tiempo suficiente para responder a una amenaza inminente y hacer una parada de emergencia de manera segura. Para protegerte a vos mismo, a tus pasajeros y a otros conductores nocturnos, debes conducir a una velocidad inferior al límite de velocidad diurno recomendado para que tengas más tiempo para ver y responder a situaciones inesperadas.
Al conducir de noche, solo podes ver la distancia máxima que pueden alcanzar los faros. En carreteras con poca luz, la velocidad de conducción debe ser un poco más lenta que el límite de velocidad durante el día, para que puedas ver y responder a situaciones inesperadas.
7. Si estás cansado, no salgas a la ruta. Si tenes que conducir tarde por la noche o temprano por la mañana, podes intentar utilizar el cansancio o la somnolencia para generar motivación. Sin embargo, la fatiga puede afectar tu tiempo de respuesta y aumentar la posibilidad de un accidente. Si podes, si no estás completamente alerta, evitá conducir a toda costa. Si es inevitable, asegurate de tomar descansos regulares para estirarte y bajar las ventanas para mantener el aire fresco. Si comenzas a sentirte somnoliento, detené el automóvil inmediatamente.
Estas son solo algunas de las muchas medidas para reducir el riesgo de accidentes al conducir de noche. Pero a veces, incluso cuando se toman medidas de seguridad adicionales para protegerse y proteger a los demás, ocurren accidentes.
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